75.-LA LISTA DE SCHINDLER

DIRIGIDA POR: Steven Spielberg

INTÉRPRETES: Liam Neeson, Ralph Fiennes, Ben Kingsley

AÑO: 1993/DURACIÓN: 187’/GÉNERO: Histórico, drama

                         

    “-Nadie puede hacer nada por arreglar el pasado. Ya ha ocurrido. Sin embargo, una película como ésta puede impactarnos y lanzar un mensaje sobre lo que nunca debe volver a ocurrir”-Steven Spielberg

    Esta impactante película en blanco y negro (gran acierto por parte del Rey Midas de Hollywood), narra la imperecedera y auténtica historia del enigmático Oskar Schindler, miembro del partido Nazi, mujeriego, y un especulador en tiempos de guerra, que salvó las vidas de más de 1100 judíos durante el Holocausto. Es el triunfo de un hombre que influyó positivamente en uno de los más negros capítulos de la historia de la humanidad, y el drama de quienes sobrevivieron gracias a lo que hizo.

    Interpretada por un aplaudido reparto encabezado por Liam Neeson, Ben Kingsley y Ralph Fiennes, ganó siete premios de la Academia, al mejor director, “ película, “ fotografía, “ música, “ montaje, “ guión y “ dirección artística.

    Se apoya en un guión bien construido de Steven Zaillian. Es la adaptación de una obra de Thomas Keneally, una historia fascinante del hombre de negocios nazi, Oskar Schindler, que salvó la vida de muchos judíos polacos.

    Spielberg hace un trabajo extraordinariamente bueno, que mantiene nuestro interés durante más de tres horas y nos muestra muchos entresijos del Holocausto que no se habían visto antes en la gran pantalla. Hay que añadir la rica y bella fotografía en blanco y negro de Janusz Kaminski. El director judío, despliega su capacidad y extrae la máxima intensidad del terror y el patetismo existencial que transmite la obra de Keneally. Los judíos polacos podían ser asesinados en el momento en que se le antojara al director del campo de trabajo (Ralph Fiennes). Se levanta por la mañana y en ayunas, se pone a disparar a judíos desde su balcón. Fiennes da verdadero miedo, está totalmente desquiciado. Y la eficaz encarnación que Liam Neeson hace de Schidler funciona como hilo que nos conduce a los nazis, y la sutil actuación que Ben Kingsley hace del contable judío, su mano derecha y su conciencia silenciosa, nos acerca a los judíos polacos.

    Lo que por desgracia falta son muchos de los elementos más fascinantes de la historia de la vida real que no encajan en el panorama piadoso y patriarcal de Spielberg, como por ejemplo, el papel predominante de Emilie, la esposa de Schindler, que salva también las vidas de los judíos después de que él vuelva a vivir con ella, mientras monta una fábrica de municiones falsa en Moravia, o el hecho de que continuara engañándola con otras mujeres. Todo esto lo explica muy bien en el documental que muestra las experiencias personales de los testigos oculares.

    El interés de Steven Spielberg por “La lista de Schindler”, despertó en 1982, año en que se publicó “El arca de Schindler”, el libro de Thomas Keneally, con una gran acogida por parte de la crítica. Lo que le atrajo de la novela fue el énfasis que ponía en las experiencias personales de la gente, que consiguen atrapar emocionalmente al lector y llevarlo a presenciar los sobrecogedores acontecimientos del Holocausto. Este largometraje relata fielmente parte de la vida de los personajes, historias reales que parecerían increíbles si fuesen parte de una obra de ficción.

    Pocos mese después del estreno de “E.T. el extraterrestre” (1982), a Spielberg le entraron muchas ganas de rodar “La lista de Schindler”, pero la falta de tiempo y ciertos obstáculos en el guión obligaron a posponer la película hasta 1993. Pero aquellos diez años de retraso, fueron beneficiosos, porque Spielberg ya había madurado lo suficiente (artísticamente hablando). “No hay mal que por bien no venga.”

    Ésta es una de las producciones más grandes que jamás se han filmado en Polonia. Comenzó el 1 de marzo de 1993 en Cracovia y se completó 72 días después, cuatro días antes de la fecha prevista. En el equipo, predominantemente polaco, participó también gente de Inglaterra, Croacia, Austria, Alemania, Canadá, Israel y EEUU (incluido un nutrido grupo de americanos de ascendencia polaca). Según Spielberg y el productor, Gerald R. Molen, “Cracovia es un escenario formidable. Es un monumento histórico maravilloso. Utilizamos muchos aspectos distintos de la ciudad: las calles, los edificios, el ambiente…” Además, la producción utilizó muchos de los lugares originales, incluyendo la antigua fábrica de Schindler y el elegante apartamento en el que residió durante su estancia en Cracovia. El estado de ambos edificios es prácticamente idéntico al de hace 50 años.

    Todo lo que ha visto Spielberg del Holocausto, ha sido en documentales y libros: en general, imágenes en blanco y negro muy austeras, por eso decidió rodarla en blanco y negro, cosa que a Kaminski, el director de fotografía, le encantó. “-Durante la producción, no era demasiado atractiva, pero en el celuloide quedó perfecta.” Dijo Spielberg. Él y el resto del equipo se dieron cuenta de que los prisioneros judíos, no llevaron trajes a rayas hasta el final de la guerra. Hasta aquel momento, llevaron ropa de calle.

    El 40% de las escenas se rodaron con cámaras de mano. Lo cierto es que el blanco y negro y la cámara en mano, daban a la policía un estilo documental, porque Steven tampoco quería acentuar el suspense, la acción o el patetismo. En fin, todo fue un acierto por parte de Spielberg. “-Esta lista…es el bien absoluto.”