73.-TENIENTE CORRUPTO (BAD LIEUTENANT)

DIRIGIDA POR: Abel Ferrara

INTÉRPRETES: Harvey Keitel, Frankie Thorn, Paul Hipp

AÑO: 1992/DURACIÓN: 96’/GÉNERO: Cine independiente, drama policíaco

                             

    Brutal película de Abel Ferrara. Director neoyorquino que ha hecho obras como “El rey de Nueva York”(1990) con un pletórico Christopher Walken que “se come” a David Caruso, Wesley Snipes y Laurence Fishborne o “El funeral” con Chris Walken(actor fetiche de Abel) encabezando el reaparto junto con Benicio del Toro y Chris Penn(hermano de Sean, que falleció hace un par de años). Ferrara es un director de cine independiente, que no se anda con florituras a la hora de hacer sus películas. Son fuertes, duras como la vida misma, pero realistas. Y es que ya lo decía Woody Allen, “si quieren ver un final feliz, vean una de Hollywood”

    Aquí fue donde realmente me dí cuenta de lo mucho que vale Harvey Keitel como actor, pues es uno de los mejores actualmente. Por ejemplo, en “Malas calles” (1973) y “La última tentación de Cristo” (1988) ambas de Scorsese, está genial, y no digamos ya en “El piano”(1994) en la que interpreta a un maorí analfabeto. Es una lástima que Coppola le echara del rodaje de “Apocalypse Now” allá por 1976. Al parecer no le convencía su actuación en el papel protagonista de Willard. Al final fue a parar a Martin Sheen, quien lo hizo estupendamente la verdad.

    Un teniente de la policía (Harvey Keitel), es alcohólico y adicto a varias drogas (cocaína, heroína, crack…) También es un estafador y jugador compulsivo, aunque eso sí, un devoto católico. Le asignan el caso de una monja que ha sufrido una múltiple violación en el altar de una Iglesia. El caso le obsesionará hasta tal punto de sentirse el elegido de una misión divina, que lo lleva al planteamiento de la coherencia entre su fe y sus actos a implorar su redención.

    Ésta es una película muy dura y polémica, en la que nada más empezar, vemos al teniente Strawberry resacoso, que no soporta oír a sus hijos y al dejarlos en el colegio, esnifa una rayas de cocaína en su coche. Éste, es un hombre que no parece gustarle los niños, pasa totalmente de su mujer y las típicas comidas familiares y por si fuera poco, ha de aguantar a su suegra que vive en su casa.

    Strawberry, quien cree estar bendecido porque afirma que lleva esquivando balas desde los catorce años, cree también que está vinculado con la Iglesia, al imaginar que habla con Cristo. Pero esta estremecedora historia relata más bien “el descenso al infierno” del teniente, pues al apostar a favor de los Dodgers (su equipo de béisbol), pierde un dineral y al decir doble o nada vuelve a perder. Y es que cuando la suerte no está de tu lado, hay que saber cuando dejarlo. La mafia acaba aceptando su última oferta, triple o nada. Pierde nuevamente. Todo esto mezclado con drogas duras y un mal ambiente laboral y familiar, nunca puede acabar bien…

    Hay un guiño a “Malas calles”, con la bonita canción de Johnny Ace,”Pledging my love”. Señores, les invito a ver esta gran película, no apta para sensibles. Y por favor, no vean la nueva versión de "Teniente corrupto" (2010) de Werner Herzog protagonizada por Nicolas Cage, porque es terriblemente peor que ésta. No se en qué estaba pensando el director alemán al hacer este fallido remake cuando ni siquiera tuvo la originalidad de ponerle otro título distinto al menos...ni eso. Ésta es la buena, la auténtica, con Harvey Keitel en estado puro, en el mejor papel de su vida.